La basura y los escombros que se acumulan en las calles de la ciudad son arrastrados por los desagües pluviales y llevados por el agua de lluvia a las vías fluviales de la Ciudad de Nueva York y más allá, afectando la salud de la vida marina. Un paso importante para tener vías fluviales sanas en la Ciudad de Nueva York es tener las calles libres de basura.
La basura y los escombros que se acumulan en las calles de la ciudad son arrastrados por los desagües pluviales y llevados por el agua de lluvia a las vías fluviales de la Ciudad de Nueva York y más allá, afectando la salud de la vida marina. Un paso importante para tener vías fluviales sanas en la Ciudad de Nueva York es tener las calles libres de basura.
La basura en las vías fluviales de la ciudad de Nueva York comienza como desperdicios en las calles que son transportados por el agua de lluvia a los alcantarillados pluviales y, en última instancia, a los ríos y arroyos locales. Esta contaminación puede dañar la vida silvestre local y a las personas que residen en la ciudad. La contaminación causada por productos químicos y la basura que llega al río a través de los desagües pluviales es tóxica para la vida acuática, causando asfixia, infección, hambre y que se ahoguen criaturas marinas locales como tortugas, peces y aves. La basura que llega a nuestras vías pluviales también puede contaminar nuestro suministro de alimentos y exponer a las personas a patógenos y toxinas peligrosas. Mantener las calles libres de basura es un primer paso importante para tener vías fluviales sanas en la ciudad de Nueva York.